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La ONU estableció en 1999 que el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las mujeres se celebrase cada 25 de noviembre en recuerdo a la activista dominicana Minerva Mirabal (34 años) y a sus hermanas, Patria (36 años) y María Teresa (25 años), que fueron asesinadas el 25 de noviembre de 1960 por la policía secreta.
En diferentes partes del mundo, este día se han vivido jornadas, diálogos, ferias de concientización entre otras, con el fin de visibilizar esta situación y exigir a los gobiernos e instituciones voluntad y profundo compromiso con los derechos humanos
En este entendido, la Oficina Nacional de Asuntos Externos de la Comunidad Bahá´í de Bolivia, participó del Encuentro- Dialogo Macrodistrital “Mujeres combatiendo desigualdades”, que concentro a diferentes instituciones y mujeres de todas partes del municipio de La Paz para dialogar sobre acciones de empoderamiento.
Así también se participó de un evento interinstitucional organizado por la institución Adelante Mujer en el municipio de Cochabamba, por motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las mujeres, donde la Oficina Nacional de Asuntos Externos fue convocado como ponente.
La violencia es un obstáculo para alcanzar la igualdad, el desarrollo, la paz y el respeto de los derechos humanos de mujeres y niñas; lo establecido en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que es una promesa de no dejar que nadie se quede atrás, no podrá cumplirse si no se pone fin a la violencia contra estas poblaciones.
“Mientras no se le permita a la mujer alcanzar su máximo potencial, el Hombre no podrá lograr la grandeza que podría ser suya”. El mundo de la humanidad consta de dos partes: hombre y mujer. Cada una es el complemento de la otra. Por consiguiente, si una es defectuosa, la otra necesariamente será incompleta, y la perfección no podrá alcanzarse”. Casa Universal de Justicia.